Actualizado por ultima vez el 29 de noviembre de 2021, por Luis Benites.
El paradigma de Asch , en psicología, es una serie de experimentos sobre la conformidad realizados por Solomon Asch en la década de 1950. Estos experimentos probaron la forma en que los individuos respondían al pensamiento grupal y hasta qué punto la presión social podía hacer que una persona se conformara.
El experimento inicial de conformidad de Asch
En el experimento inicial, se le pidió simplemente a un sujeto de prueba que completara una prueba de visión para un proyecto de investigación. Luego fueron invitados a una habitación con otros siete «participantes». Los otros participantes eran, de hecho, colaboradores de Asch, con respuestas escritas; en cada ejecución del experimento solo había un ‘participante ingenuo’.
Se mostró un conjunto de dos tarjetas grandes; uno con una línea, el otro con tres. A cada participante se le preguntó en voz alta qué línea de la segunda tarjeta (A, B o C) se parecía más a la línea de la primera. En cada caso, la respuesta verdadera era obvia (en el ejemplo de la izquierda, la respuesta verdadera es C). Los siete participantes falsos dieron respuestas que habían decidido previamente, y al participante real siempre se le hizo la última pregunta.
En dieciocho ensayos, los siete participantes falsos dieron una respuesta incorrecta unánime 12 veces. El objetivo del estudio era ver cómo este entorno afectaría al participante ingenuo y hasta qué punto estaría dispuesto a ajustarse a las respuestas de los demás.
Asch realizó este experimento 50 veces, recopilando datos. Posteriormente, entrevistó a los participantes sobre sus sentimientos. Asch también realizó una prueba de control , en la que no hubo ‘participantes falsos’ y solo a dos participantes ingenuos a los que se les hicieron las mismas preguntas de la misma manera. El control lo corrió 37 veces.
- En el 36,8% de los casos, se tomó la decisión de sumarse a la mayoría unánime y dar una respuesta incorrecta cuando se le preguntó en qué línea era la misma.
- El 75 % de los participantes se conformaron al menos una vez en las 12 pruebas de respuestas incorrectas.
- El 25 % de los participantes nunca se conformaron.
En el grupo de control , menos del 1 % de los participantes dio una respuesta incorrecta.
Al ser entrevistados, los participantes dieron diferentes razones para haber tomado la decisión de conformarse o no conformarse. Algunos reconocieron que habían sabido la respuesta correcta todo el tiempo, pero que no habían querido darla por temor a que los consideraran extraños. Para otros, la opinión unánime de los demás había sido suficiente para hacerlos desconfiar de sus ojos; pensaron que todos deben ser mejores para diferenciar y así tener la respuesta correcta.
Experimentos posteriores del paradigma de Asch
En años posteriores, Solomon Asch realizó variaciones en el experimento original del paradigma de Asch para determinar qué factores cambiarían la probabilidad de que un individuo cediera a la conformidad.
Encontró que la presencia de un ‘verdadero socio’ (dos participantes ingenuos en la sala con colaboradores) disminuyó en gran medida el número de casos de conformidad. Sin embargo, cuando este ‘verdadero socio’ estuvo en la habitación solo la mitad del tiempo, la tasa de conformidad fue incluso más alta de lo habitual después de que él salió de la habitación.
También descubrió que la cantidad de ‘participantes falsos’ afectaba la tasa de conformidad hasta cierto punto: un actor causaría solo una cantidad muy pequeña de conformidad, dos la aumentarían significativamente y tres eran suficientes para hacer que la mayoría de los participantes ingenuos dudaran de sí mismos. . Más allá de tres, no parecía importar mucho cuántos actores había en la sala.
Referencias
MacLeod, Sam. Experimento Asch. Recuperado de https://www.simplypsychology.org/asch-conformity.html el 30 de marzo de 2018
Asch, Salomón. Opiniones y Presión Social. Scientific American 193(5):31-35 · noviembre de 1955 recuperado de https://www.lucs.lu.se/wp-content/uploads/2015/02/Asch-1955-Opinions-and-Social-Pressure.pdf el 30 de marzo de 2018
